En el día de hoy se han celebrado sendas ruedas de prensa en Gran Canaria y Tenerife convocadas por el Movimiento Social "Otra Educación Pública es Posible" e "Iniciativa por la Defensa de la Educación Pública Canaria", con la participación del STEC-IC. En las mismas, representantes de la Comunidad Educativa exigieron un incremento presupuestario en el área educativa para el 2012 al tiempo que recordaron que la ILP por una Ley de Educación Canaria, presentada ante el Parlamento autonómico con el aval de más de 35.000 firmas, es una oportunidad única para tomar decisiones orientadas a la mejora de nuestra Educación Pública.

Comunicado de Prensa:

A pesar de que en este comienzo de curso el nuevo equipo de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias ha hecho un significativo esfuerzo para garantizar las plantillas docentes y las sustituciones del profesorado, dando ciertos visos de normalidad al arranque de la actividad académica, la sociedad canaria no puede en modo alguno estar satisfecha. Porque normalidad, ausencia de conflictos, no es sinónimo de calidad. Ni de superación de los graves déficit que afectan a nuestro sistema educativo.

Hay que recordar que en Canarias, entre los años 2009 y 2011, hemos crecido en más de 8.000 alumnos/as, mientras paralelamente en esos dos ejercicios se reducían 1.200 plazas docentes. Y, en el mismo período, se recortaban unos 200 millones de euros (33.200 millones de pesetas) en los presupuestos públicos educativos de nuestra Comunidad. ¿Qué ha supuesto esas circunstancias y esas decisiones políticas? Entre otras cosas, una mayor masificación en las aulas y, por tanto, una enseñanza con enormes problemas para atender a aquellos alumnos con dificultades de aprendizaje, menos atención a la diversidad.

Podemos reconocer una mejor gestión en el inicio del curso. Pero los problemas de la educación canaria no son sólo de gestión, sino también, y sobre todos, de políticas educativas. En ese sentido, queremos que este Gobierno nos clarifique cuál es la orientación de sus políticas educativas, cuáles son sus propuestas y prioridades para transformar este sistema educativo, superando sus actuales y profundas carencias.

Escuchamos a las fuerzas parlamentarias manifestar su pleno acuerdo, su total coincidencia en que la formación y el empleo son las dos grandes prioridades del Archipiélago. Pero ese discurso casa bien poco con un sistema educativo público cada vez más descapitalizado y en el que parece que sólo se aspira a mantener lo que hay. Y mantenerlo, además, a la baja, con menos recursos. Y lo que hay son elevados índices de fracaso escolar, los más altos de España y Europa. Y lo que hay es una FP que no responde a las necesidades de nuestro sistema productivo y a sus expectativas de futuro. Y lo que hay es una inadecuada atención a los alumnos y alumnas con necesidades de apoyo educativo. Y lo que hay es una escuela que no corrige las desigualdades sociales y que condena a miles de alumnos al fracaso.

El Parlamento iniciará pronto el debate de los Presupuestos de la Comunidad Canaria para 2012. Y queremos decir bien alto que no es suficiente que se mantengan los Presupuestos que tenemos. Salvo que se reconozca que se quiere mantener la Educación que tenemos, los bajos niveles de éxito educativo que tenemos, la insuficiente formación que tenemos, la desesperanza que tenemos.

Esas aspiraciones de que la Educación incida en una mayor competitividad de nuestra gente y en una mejora del empleo y de la calidad de este, reiteradas por todas las formaciones políticas, tienen que verse mítidamente reflejadas en los Presupuestos. De manera que recuperemos a lo largo de la legislatura esos 200 millones que se nos han detraído en 2010 y 2011.

Somos la comunidad que más ha recortado en Educación en el período reciente. Y la Comunidad con peor punto de partida, lo que nos alejará aún más de la media española en los diferentes parámetros educativos. Tenemos que cambiar las cosas hoy para no seguir lamentándonos mañana. Persistir en la actual línea en Educación es condenar a los jóvenes canarios a un futuro de precariedad. Es condenar a este Archipiélago a la mediocridad educativa y a la ausencia de cohesión social.

Recordamos, asimismo, que en febrero de 2011 entró en el Parlamento de Canarias la ILP por la mejora de la educación pública canaria; y que es responsabilidad del Parlamento dar respuesta a la demanda avalada por más de 35.000 ciudadanos y ciudadanas de las Islas. Esperamos que pronto el Parlamento establezca fechas para el debate en la Cámara de esta ley. Y que los grupos presentes en su seno estén a la altura de las circunstancias aportando y enriqueciendo esta ILP. Es, precisamente, la ILP una oportunidad única para debatir con rigor sobre las necesidades de nuestro sistema educativo y para tomar decisiones consensuadas y prioritarias que comprometan a este y futuros gobiernos en la senda de la mejora de la educación pública canaria.

Canarias, a 18 de octubre de 2011.

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